La sexualidad es, según la OMS “una energía que nos impulsa a buscar afecto, contacto, placer, ternura e intimidad…, influye en nuestros pensamientos, sentimientos, acciones e interacciones y por tanto está relacionada con nuestra salud física y mental”. Y es en este sentido que la sexualidad se educa, como se educan otras dimensiones del desarrollo infantil y adolescente y la educación afectivo sexual es un derecho humano de niños, niñas y adolescentes.
En este contexto surge esta guía….
Se trata de un material dónde los y las adolescentes puedan encontrar respuesta a su curiosidad, llamando a las cosas por su nombre, y destacando la indivisible unión entre sexualidad, afecto, respeto e intimidad.
Contribuimos a que los y las adolescentes logren tres aprendizajes importantes:
- Vínculos sanos, donde cuidan al otro y se cuidan a sí mismos.
- Poder reconocer sensaciones corporales y las emociones que nos producen.
- Logra tener gente querida, amigos, familia, una red afectiva sana a la que recurrir cuando lo necesitemos.
Fuente: Ayuntamiento de Burgos